Son herramientas muy utilizadas o por no decirlo unos de los principales instrumentos usados por el albañil, esta es el que da los acabados elegantes en las paredes de las construcciones. La paleta o cuchara de albañil está formada por una lámina de metal con forma triangular sujeta a un mango de madera y sirve para aplicar la mezcla de cemento para pegar los bloques o ladrillos o simplemente aplanar el concreto o estucado en las paredes.

Su hoja es una lámina de acero, la misma que proporciona durabilidad y resistencia, esta es básicamente de forma triangular y en ocasiones trae su contorno redondeado en lugar de puntas, sirve para conformar y transportar material además ayuda al trabajador como protección para su piel, ya que no le permite tener contacto directo sus manos con el material de construcción como son el cemento y yeso, al contacto por mucho tiempo.

Se puede elegir el tipo de paleta a utilizar dependiendo del trabajo que se vaya a desempeñar, es así que tenemos la paleta de yeso la que termina en punta y permite hacer las esquinas en las paredes; el paletín en cambio se emplea para hacer los detalles finales. Otra herramienta muy parecida y utilizada por el albañil es la llana, que es de una superficie metálica, plástica o de madera plana y lisa sujeta por una asa de madera, en esta tenemos de dos clases como es la dentada y la redonda.

La dentada sirve para dosificar la cantidad de mezcla a utilizar y la redonda para extendido de la mezcla sobre superficies sean estas paredes como pisos cumpliendo la función de alisado y comprimiendo la mezcla en las superficies, también nos sirve para blanquear paredes, otro uso es también para recubrir ladrillos, bloques o vigas y reparar grietas en las fachadas tanto interiores como exteriores.