Las estufas de gas son una técnica fantástica para calentar rápidamente una habitación de tamaño medio o grande utilizando propano líquido como fuente. Con el tiempo, la eficacia y la demanda de estos calentadores se han disparado. Con una eficiencia del 99%, estos calefactores pueden disfrutarse tanto en interiores como en exteriores. Tanto si está construyendo su propia casa y necesita elegir una fuente de calor, como si quiere reemplazar su sistema de calefacción actual o quiere comprar una casa que funcione con propano, necesitará saber todo sobre un calentador de propano. Estas estufas de gas son eficientes, fáciles de mantener, asequibles y rápidos de instalar.
Estos son sólo algunos de los factores que debe tener en cuenta a la hora de elegir un sistema de calefacción, sobre todo si tiene una opción. Aunque el gas natural, el gasóleo de calefacción y la calefacción de propano son los tres métodos más comunes de calefacción doméstica en todo el mundo, debido a sus numerosas ventajas, los calentadores de propano se encuentran entre los más utilizados.
En este artículo, hablaremos de qué son las estufas de gas, cómo funcionan, sus ventajas y desventajas.
¿Qué es un calentador de propano?
El propano se fabrica y se mantiene como líquido en un tanque antes de ser descargado como gas. Los calefactores de garaje, los calefactores de almacén y los calefactores de patio utilizan propano a presión para calentar lugares que no están debidamente aislados. Estos calefactores suelen ser portátiles, lo que permite sacarlos para eventos importantes. Los calentadores de propano no requieren principalmente líneas de gas externas o electricidad. Por varias razones, la mayoría de la gente prefiere los calentadores de propano, incluidos los propietarios de viviendas, los organizadores de eventos y las empresas de construcción. Estos calefactores están disponibles en una amplia gama de tipos, potencias y tamaños. Para evaluar su potencia energética, los calentadores de propano se clasifican en Unidades Térmicas Británicas.
Una habitación modesta de 100 pies cuadrados sólo necesitaría 10.000 BTU, mientras que un jardín o almacén grande podría necesitar hasta 200.000 BTU para calentar 5.000 pies cuadrados. Los calefactores portátiles no suelen requerir ventilación ni alimentación. Se encienden con una cerilla, se conectan a un pequeño depósito de propano y se desplazan para poder moverse con comodidad. Algunas de las estufas de gas contienen un escudo con capucha y una antorcha. Estos calefactores pueden utilizarse para comidas al aire libre y fiestas en patios, céspedes y cubiertas. Otros calefactores son cajas más pequeñas, normalmente conocidas como calefactores de convección y radiantes, que suelen verse en talleres, garajes y cobertizos. Mueven el aire utilizando las corrientes de aire naturales.
Los calefactores de propano son tanto fijos como portátiles. También pueden acoplarse a una carretilla compacta, lo que permite llenarlas en una gasolinera que venda propano. Los calefactores de propano permanentes requieren un permiso de construcción y deben fijarse al techo, la pared o el suelo. Distribuyen el calor por la habitación con la ayuda de componentes de aire forzado. Los calefactores de propano se conectan con una toma de corriente, ya que el ventilador necesita ser alimentado con electricidad. Estos calefactores suelen ser más grandes y necesitan un respiradero exterior. Como el propano requiere oxígeno para arder, cualquier lugar cerrado con un calentador de gas debe tener acceso a oxígeno fresco.
Los calentadores alimentados con propano funcionan de forma similar a los calentadores alimentados con metano. En realidad, un profesional de HVAC puede convertir los calentadores de gas conectados a la red de gas a propano. En comparación con el metano, el propano tiene la ventaja de no emitir gases de efecto invernadero ni CO2 cuando se quema. Como el propano se almacena, puede adquirirse a un coste menor antes de los meses de invierno.
¿Cómo funcionan los calentadores de propano?
Un calentador de propano se compone de diferentes elementos que lo hacen funcionar. Un calentador de propano estándar encendido con una cerilla proporcionará calor, pero no es un calentador eficaz porque ese no es su propósito principal. Un calentador de propano tiene algunas características que utilizan la llama para conseguir un patrón de calentamiento más eficaz, a la vez que hacen que el calentador sea más fácil de usar.
- Combustible
El combustible que utilizamos en los calentadores se llama propano y contiene sustancias químicas adicionales como el butano y el propileno. El propano es un combustible que arde de forma limpia y eficiente. Generalmente es un gas; sin embargo, el propano se comprime en un líquido para su uso en parrillas y calentadores.
- Encendedor
Dispone de una luz piloto que enciende constantemente una pequeña llama, lo que le ahorra el tiempo de encender la llama una y otra vez desde cero. Todo lo que tiene que hacer es tirar del botón de encendido mientras presiona el mando de control hasta que aparezca una llama en el piloto.
- Elemento
Los calentadores de propano tienen un elemento, normalmente de porcelana, que se utiliza para extender la llama en un patrón y distribuir el calor del combustible.
- Piloto
El piloto es una pequeña llama que arde casi continuamente y consume muy poco combustible. Una vez que aparece la llama, puede dejarla arder incluso cuando la estufa no está funcionando. Le permite ahorrar tiempo.
Su objetivo es permitirle encender instantáneamente el quemador principal en lugar de tener que partir de cero con el encendedor cada vez.
- Controlar
En un calentador, la capacidad de regular la temperatura es un atributo útil. Un termostato automático es una técnica común para lograr esto, y algunos de los calentadores avanzados pueden incluir uno. Sin embargo, muchos calentadores no tienen esta opción y utilizan un control manual de la llama con un rango de ajuste bajo y alto.